Apenas a 12 horas del cierre de mercado, el Betis sigue sin fichar un nueve. La salida de Borja Iglesias rumbo a Alemania hace prioritaria la contratación de un killer para hacer frente a la segunda vuelta de la temporada.
Tras un baile de nombres parecía que sería Ezequiel el Chimy Ávila quién reemplazase al panda, pero las pretensiones económicas de Osasuna y la intromisión del Getafe han complicado la llegada del rosarino a Sevilla.
Así, la dirección deportiva ha puesto sus ojos en Cédric Bakambu. El congoleño es propiedad del Galatasaray, actual colíder de la Superliga turca, donde llegó tras un paso por Emiratos Árabes, y esta temporada ha disputado 16 partidos, viendo puerta en dos ocasiones.
El congoleño, que se encuentra disputando la Copa Africana, es del gusto de Pellegrini. Y es que ambos comparten un paso exitoso por el Villarreal. El africano estuvo en el club castellones entre 2015 y 2018, donde disputó 105 partidos y marcó 47 goles, ganándose así un traspaso millonario al fútbol chino. 6 años después el futbolista podría volver al fútbol español, asegurando desde Turquía que existe un acuerdo entre los clubes.
De todas formas, la operación está a esperas de resolver el futuro del Chimy, que sigue siendo la opción preferente de la dirección deportiva, a pesar de la intromisión del Getafe, que habría preguntado a Osasuna por el Chimy Ávila ante la posible marcha de Enes Ünal rumbo al Bournemouth inglés, equipo dirigido por Andoni Iraola. Los azulones podrían ofrecer una mayor suma de traspaso que el Betis, que hasta el momento se habría encontrado con la negativa por parte del Osasuna a pesar de tenerlo todo atado con el atacante.
El tercero en discordia es Patson Daka, también relacionado con el conjunto bético y propiedad del Leicester City. A pesar de la negativa inicial de los "foxes", el Betis ha vuelto a llamar a la puerta en este final de mercado confiando en las buenas relaciones entre ambos conjuntos fruto del traspaso el invierno pasado de Ayoze Pérez