David de Gea es un gran portero que cíclicamente comete algún fallo preocupante. Y volvió a suceder. El portero del Manchester United cometió un error imperdonable confiándose ante Calvert-Lewin que costó el 1-0 en la primera mitad.
La acción no podía ser más inocua, el choque acababa de comenzar. Al tercer minuto, Maguire le cedió la bola y la controló en el interior del área. El madrileño buscó algún compañero, ralentizó el pase y, cuando lo efectuó, Calvert-Lewin estaba muy encima de él. ¿Y qué ocurrió?
Que el meta despejó contra el cuerpo del 'toffee' y la bola se coló en su portería. Nadie podía creerlo.
Y todo ello para delirio de Goodison Park, para estupefacción de los seguidores del United... y para preocupación de los aficionados españoles pensando en la próxima Eurocopa.
Y es que los dos guardametas que han tenido protgonismo en la fase de clasificación, De Gea y Kepa, no andan muy bien, precisamente. El madrileño, porque había perdido su sitio en los últimos partidos; el vasco, porque ha dejado de ser titular en el Chelsea.
Menos mal para De Gea que Bruno Fernandes pudo reparar el daño de ese gol empatando antes del descanso. pero ahí quedan de nuevo las dudas y los fantasmas.
1 de marzo de 2020