"No puede mantener el marcador, tras reconocer que jugaron (Dinamo Zagreb) con un hombre dopado", aseguró Wenger, pues el Arsenal cayó por 2-1 en Zagreb. Sin duda, la reclamación del galo beneficiaría en gran medida a su equipo.
Pero no se quedó ahí, si no que acusó a la UEFA de permitir el dopaje, de aceptarlo, al no castigar también al club alterando el resultado del encuentro en el que se detectó el positivo.
Arijan Ademi, el futbolista en cuestión, asegura por su parte ser inocente.