A la quinta fue la vencida para Frank de Boer. El seleccionador neerlandés, que reemplazó a Ronald Koeman, no había logrado aún la victoria y, al fin, ante Bosnia pudo celebrarla.
Para ello fue clave Georginio Wijnaldum. El centrocampista del Liverpool tardó 13 minutos de partido en marcar dos goles que allanarían el camino a Países Bajos.
En el 6', y tras un disparo de Pjanic rozando el palo que asustó a los neerlandeses al poco de empezar, se inauguró el marcador. El 'red' hizo gala de su gran llegada desde segunda línea y, completamente solo en el área, remachó el centrochut de Dumfries.
Apenas tardó siete minutos en firmar su segundo tanto de la noche el bueno de Wijnaldum. De nuevo sin marca en el área y sin oposición alguna de Sehic, el del Liverpool culminó un pase de la muerte de Berghuis para poner el 2-0.
Ya en la segunda parte, Depay sentenció el choque con el 3-0, que llegó en el 55'. El tanto, casi idéntico al segundo de Wijnaldum, supuso la segunda asistencia de la noche para Dumfries.
Bosnia logró el tanto del honor en el 63' con el que se despidiría de la Liga A del torneo. Prevljak se sumó a la fiesta de los remaches en el corazón del área y puso el 3-1 definitivo a pase de Visca.
El triunfo deja a Países Bajos con ocho puntos en el liderato, a expensas del resultado del Italia-Polonia. Por su parte, Bosnia, con dos unidades, certifica su descenso a la Liga B.