El Barça completó una gran primera mitad en el Camp Nou ante el Getafe. Los de Ronald Koeman se fueron al descanso con 3-2 a favor y con un doblete de Messi, que volvió a ser diferencial.
Pensando en el descanso de sus jugadores, el técnico neerlandés realizó cambios y el choque cogió un ritmo lento e insípido y las ocasiones brillaron por sus ausencias.
Sin embargo, un penalti de Araujo sobre Unal le dio picante a un duelo que parecía muerto. El propio charrúa enmendó su error con el 4-2, tras rematar un saque de esquina ejecutado por Leo.
Para sentenciar el encuentro, Chakla, que la pifió en el segundo de los azulgranas con un tanto en propia meta, cometió la pena máxima sobre Griezmann en los últimos suspiros.
El francés no falló desde los once metros y selló la 'manita' del Barça para seguir muy vivo en la lucha por la Liga.