Tras la derrota, que a punto estuvo de costarle la eliminación, el entrenador del DIM denunció una extraña situación en el vestuario de su equipo del estadio Alfonso López.
"Entramos a un camerino que tenía un olor a un químico muy raro", dijo para sorpresa de los presentes en la sala de prensa.
"Son cosas que también hay que mencionarlas porque no está bien, no es competir en buena lid pero no puedo acusar a nadie. Descubrimos las cosas que eran, estaban ahí, las recogimos, pero el olor se permeaba por todo el camerino. Esa no es la manera de jugar este tipo de partidos", explicó.
Eso sí, una vez denunciada la situación, huyó de excusarse en esto por el mal encuentro de los suyos: "Tampoco lo quiero poner como excusa porque no jugamos nuestro mejor partido".