Apenas se habían disputado tres jornadas, cuando el conjunto blanco recibió al Levante ya necesitado de puntos. Aunque Lucas Vázquez logró apagar el incendio que originó Ivi a los 12 minutos, el Santiago Beranbéu tuvo que conformarse con empate a uno.
Mientras el Barcelona se escapaba en la clasificación a ritmo de imbatibilidad, el Real Madrid se fue desangrando en el campeonato doméstico hasta llegar al Ciutat de Valencia sin margen de error.
Sin embargo, un nuevo tropiezo (2-2) dejó a los blancos a 17 puntos del conjunto azulgrana, que ya comenzó a saborear el título de Liga en la pasada jornada 22.
No obstante, el Levante sí fue un punto de inflexión para el Madrid en la temporada 2006-07. Pese a dejar a Capello contra las cuerdas por perder 0-1, los de Chamartín acabaron celebrando el campeonato doméstico, abonándose al 'clavo ardiendo'.