'La Mannschaft' aún no ha digerido del todo la soprendente derrota que le infligió el combinado mexicano, pero no hay tiempo que perder. La vigente campeona debe ganar a los suecos para hacer borrón y cuenta nueva y espantar posibles fantasmas.
Estos ya aterrorizaron a España en Brasil 2014. Como Alemania, 'la Roja' llegaba al Mundial para defender título y empezó perdiendo el primer choque. Eso sí, fue un contundente 5-1 de Holanda que hizo saltar todas las alarmas.
Si bien las sensaciones son bien distintas, el mal sabor de boca, las dudas y el factor sorpresa sí se repite en ambos casos. Pocos esperaban un comienzo así de los de Joachim Löw, al igual que la 'manita' a la España de Del Bosque también rompió más de una quiniela.
El combinado ibérico no logró cambiar la dinámica y cayó también en el segundo partido. Un 2-0 ante Chile que dejó al torneo sin su último dueño a las primeras de cambio.
Los germanos no quieren que se repita la historia y, al menos, pueden usar el antecedente para rodearlo lo máximo posible y no caer en él. Ante Suecia, los Kroos, Müller, Khedira y cía se encontrarán un equipo que puede sellar el pase en caso de victoria y que está aprendiendo a vivir sin Zlatan Ibrahimovic.
Al igual que en 2014, a priori el partido más asequible para los vigentes campeones llegará en la tercera jornada. Para España ya fue tarde, ya que su victoria ante Australia sólo le dio para salvar la honra. Ahora, Alemania buscará llegar con vida al choque ante Corea y, para ello, la victoria debe ser el único objetivo en mente para los europeos.