Después de anunciar que esperará a la próxima temporada para entrenar, Antonio Conte no esquivó las preguntas sobre su frutstrada llegada al Real Madrid. El italiano respondió a las palabras que Sergio Ramos supuestamente le dedicó en público y también reconoció que hubiera manejado el vestuario blanco con cintura si hubiera llegado al conjunto de la capital.
"Cuando un técnico llega a un equipo debe llevar educación y respeto, algo que también se espera de los jugadores", apuntó Conte. "Si esto falla, comienzan los problemas", insistió, dando a entender que las palabras del capitán blanco pudieron tener su importancia a la hora de frenar su llegada al Real Madrid.
El de Camas, que había asegurado que el respeto "no se impone, se gana", vio cómo el ex entrenador del Chelsea opinaba de sus palabras en público a su llegada a Italia.
Y Conte prosiguió, explicando que hubiera manejado con calma el siempre delicado vestuario del equipo de Chamartín. "Los técnicos italianos tenemos una gran cultura de trabajo y cuando entras en un nuevo entorno no puedes cambiarlo todo, debes hacerlo muy poco a poco", detalló.
"Cada entrenador debe ser un buen sastre y adaptar sus habilidades al material humano que tiene a su disposición", concluyó el italiano, mandado unos mensajes con doble sentido que sin duda indican que pudo estar en contacto con el equipo de la 'casa blanca'.