El PSG sigue detrás de un portero tras la marcha de Buffon. Areola no es suficiente pero, al menos, la lista de pretendidos se ha reducido a dos en las últimas semanas.
Por un lado está Keylor Navas, aunque su marcha del Madrid ya parece más complicada con las cesiones de Lunin y Luca Zidane. Por lo que solo el frente Donnarumma es factible.
El conjunto italiano lo sabe y, por ello, ha dejado claras cuáles son sus pretensiones sobre una posible salida. El precio de salida ha sido fijado en 60 millones de euros.
En la capital de Francia consideran que esta cantidad es excesiva por el guardameta, de acuerdo con 'TMW', y tratan de reducir su precio hasta los 50 'kilos'.