El Cádiz está bastante enfadado después de los acontecimientos ocurridos en el partido contra el Elche. Y es que ni el árbitro principal, Del Cerro Grande, ni los asistentes en la sala VOR vieron el fuera de juego de Ezequiel Ponce en el tanto del empate de los ilicitanos.
Eso llevó al cuadro gaditano a emitir un comunicado para impugnar el partido y solicitar que se reanude a partir del minuto 81, justo antes de que tuviera lugar esa acción polémica con el argentino.
El Cádiz se aferra a un precedente que tuvo lugar en el año 2015, en un partido del Europeo Sub 19 Femenino. Inglaterra y Noruega se vieron las caras y la colegiada Matija Kurtes, con 2-1 a favor de las nórdicas, indicó una pena máxima para las británicas en el 94'.
La acción acabó en gol, pero una jugadora de los 'Three Lions' invadió el área antes de tiempo. En vez de repetir el lanzamiento, tal y como indica el punto 14 de la normativa, la germana pitó falta favorable para el combinado rival.
El órgano de Control, Ética y Disciplina de la UEFA actuó y decidió que el encuentro entre ambas selecciones tenía que reanudarse en el momento en el que pitó el penalti. Se disputaron únicamente 18 segundos y no estuvo Matija Kurtes, que fue directa a la 'nevera'.