Nada como el rugir de tus aficionados para impulsar a tu equipo en los momentos más bajos. Eso, sin embargo, tendrá que esperar varios meses en el fútbol europeo. Y, en la primera jornada, se notó.
La Bundesliga dio esperanzas al mundo del fútbol. Si bien es pronto para ver si ha habido algún problema en forma de positivo por COVID-19, lo cierto es que ver fútbol de las grandes ligas ha despertado de nuevo al aficionado.
Sin embargo, en la primera jornada de la Bundesliga se pudo apreciar una de las grandes diferencias. El factor campo se ha acabado con la nula presencia de los seguidores en las gradas.
Solo el Borussia Dortmund fue capaz de ganar en su campo. El conjunto dirigido por Lucien Favre consiguió ganar en el Signal Iduna Park por un contundente 4-0 al Schalke 04.
Ahí se acaban las victorias locales. Ganaron a domicilio el Wolfsburgo ante el Augsburg, el Hertha Berlin frente al Hoffenheim, el 'Gladbach en casa del Eintracht de Frankfurt, el Bayern de Múnich en su estreno en el campo del Union Berlin y el Bayer Leverkusen para hundir aún más al Werder Bremen.
Seis equipos se repartieron los puntos con empates. El Fortuna Düsseldorf y el Paderborn, el RB Leipzig y el Freiburg, y el Köln y el Mainz 05. Solo una victoria local en nueve encuentros.
Todo lo contrario ocurrió en la 2. Bundesliga. Hasta cinco victorias locales en ocho encuentros se vieron en la división de plata del fútbol alemán, con tres empates y ningún triunfo visitante.