La primera semana de vida de la Superliga Europea puede ser la última. Con solo Real Madrid y Barcelona ya en el barco, el proyecto queda a la deriva. Y en Inglaterra ya estudian las consecuencias de ese abandono inesperado de la competición.
Según cuenta 'Daily Mail', el acuerdo que firmaron los 12 clubes fundadores de la Superliga Europea era vinculante y, por tanto, no se podía romper en teoría durante los tres primeros años. El "pacto de sangre" del que habló Andrea Agnelli, presidente de la Juventus, en su momento.
Por ello, se estudia ahora si los equipos que siguen todavía en ella, como son Real Madrid y Barcelona, podrían recibir una indemnización de los otros diez.
Los abogados investigan el caso por si Manchester United, Manchester City, Chelsea, Liverpool, Arsenal, Tottenham, Inter, Milan, Juventus y Atlético de Madrid deben pagar por romper ese tratado.
Además, estos clubes abonaron en su día una cantidad ligeramente superior a los nueve millones de euros como capital para la Superliga. Un impulso económico que también se estudia si debe ser o no devuelto.