Este Borussia vuelve a ser una apisonadora. En lo que llevamos de 2020 los chicos de Favre han marcado nada menos que 22 goles en la Bundesliga en solo cinco partidos. El Eintracht se ha llevado cuatro, nada menos.
Tardó en abrir la lata el Borussia, pues enfrente se encontró un Eintracht muy bien plantado, que por momentos recordó al equipo que maravilló a Europa el curso pasado.
El primer aviso lo dio el luso Raphaël Guerreiro, pero su disparo, en el minuto 8, se estrelló contra la madera. Las 'águilas', pese a ello, no se amedrentaron.
Pero un zapatazo del veterano Lukasz Piszczek permitió al Borussia ponerse en ventaja, pasada la media hora de juego. Con el corto 1-0 el partido se fue al descanso. El Borussia ganaba, pero no dominaba.
La segunda parte fue totalmente diferente. El Borussia se puso el mono de trabajo y anuló a su rival. De los 17 disparos realizados por los locales en el partido, diez fueron en el segundo tiempo. Tres de esos diez tiros acabaron en gol. El Eintracht solo chutó una vez en todo el partido, en el primer tiempo, y no fue a puerta.
Ese fue el factor diferencial. El Borussia se lanzó al ataque y el Eintracht no fue capaz de responder. Y los goles comenzaron a llegar. Primero Sancho, a pase de Witsel, nada más comenzar el segundo tiempo.
El tercero lo marcó el de casi siempre este 2020, un Haaland que volvió a ver puerta, tras el hiato de la pasada jornada, a pase de un Achraf que hizo doblete de asistencias.
Y el cuarto fue de Guerreiro, en el 74', quitándose así el mal sabor de boca del tiro al palo del primer tiempo, firmando un auténtico golazo.
Un triunfo por 4-0 que sin duda servirá de advertencia al PSG por lo que pueda ocurrir el próximo martes en el Westfalenstadion de Dortmund. Y a Bayern y RB Leipzig, que no deben dormirse en los laureles, porque el Borussia ha vuelto, y viene pisando fuerte.