No hacía falta ningún milagro. Ni el calendario dice que estemos en Semana Santa. Pero este domingo acabó siendo santo para los dos equipos en Santo Domingo. Sobre todo para el Alcorcón, aunque también festejó el Espanyol.
Los de Anquela dependían de sí mismos para mantenerse en Segunda. Pero claro, había que doblegar al líder. Es cierto que ya llegaba ascendido, pero aún tenía que amarrar el liderato. Demostró Vicente Moreno en el once que los suyos también se jugaban mucho. Y en el césped, donde los catalanes fueron muy superiores a su rival desde el inicio.
En los primeros minutos, Raúl de Tomás y Dimata pudieron poner en ventaja al Espanyol. El '11' tuvo una especialmente clara, pero su remate en el segundo palo tras centro de Dídac Vilà no acabó en gol por muy poco. El belga, poco después, mandó un zurdazo fuera, muy cerca del palo de Dani Jiménez.
La superioridad visitante era clara, pero la pausa para la hidratación le dio aire al Alcorcón. Y a los tres minutos, llegó el gol de Hugo Fraile. Dani Ojeda asistió desde la izquierda y el '10', de primeras, hizo soñar a los suyos con la salvación.
Fue tan aislada la ocasión como certera la definición. Hasta el descanso, el Espanyol llegó un par de veces más con peligro, especialmente con un zapatazo desde fuera del área que se fue muy cerca del larguero, pero el Alcorcón logró llegar con ventaja al intermedio.
El arranque del segundo tiempo favoreció a los locales. Y eso que se lesionó Bellvís. Pero ese parón frenó a los 'pericos', que no entraron en el juego como acabaron el primer tiempo.
La posesión seguía siendo 'perica', pero la bola estaba lejos de la portería del Alcorcón. Los ojos del Espanyol ya empezaban a repartirse con El Toralín, donde el Mallorca, de ganar, sí obligaría a que sumasen los de Vicente Moreno para acabar como campeones.
Hubo un momento que así fue, ya que los baleares remontaron y mandaron al segundo lugar a los catalanes. Mientras, el Espanyol buscaba el empate y casi lo logra en un duro remate de Dimata que sacó bien Dani Jiménez.
En el 83', David López tuvo la última y la mejor para los suyos. Tras una gran triangulación ofensiva en el área, el capitán remató buscando el palo, pero la bola se fue fuera por muy poco. La desesperación visitante, entre alguna pérdida de tiempo y nervios lógicos del Alcorcón, quedó en nada con el gol de Curro en Ponferrada que confirmaba festejos a pares en Santo Domingo.
El pitido final descorchó el champán sobre Anquela, ya que el Alcorcón seguirá un año más en Segunda División. Por su parte, el Espanyol vuelve a Primera por la puerta grande y desde ya puede olvidarse de un infierno que apenas le ha quemado.