A Luis Enrique se le tachó de 'madridista' en sus comienzos como seleccionador español. Además de llamar en cada una de sus primeras convocatorias a una gran cantidad de futbolistas del Real Madrid, su primer once, ante Inglaterra el pasado 8 de septiembre de 2018, tuvo cuatro jugadores blancos.
Esos fueron Dani Carvajal, Nacho Fernández, Sergio Ramos e Isco Alarcón. Luego, en el 68', momento en el que entró por Iago Aspas, se unió Marco Asensio y en el banquillo se quedó Dani Ceballos. 'La Roja' ganó por 1-2 gracias a los tantos de Saúl y Rodrigo, que dieron la vuelta a la diana inicial de Rashford.
Con el paso del tiempo, esta teoría se desvaneció hasta el punto de que ningún jugador del Real Madrid acudió a la pasada Eurocopa. Siempre en rivalidad con el Barcelona, ahora es el cuadro azulgrana el que ha tomado el mando de la entidad 'merengue' en el combinado nacional, al menos por lo visto este domingo en La Rosaleda.
Luis Enrique apostó por solo un 'culé' en el once. Puso a Eric García en el eje de la zaga pese a que ha sido cuestionado en las últimas fechas por sus errores atrás. Al central le acompañaron, cuando se cumplió la hora de juego, Gavi y Ferran Torres, que entraron por Soler y Morata.
La 'manita' barcelonista -sin que ningún otro fuese al banquillo- la completaron Jordi Alba y Busquets, que reemplazaron a Marcos Alonso y Koke, respectivamente. Durante más de diez minutos, cinco jugadores del Barça, como en la época dorada de la Selección con los Xavi, Iniesta, Puyol, Piqué, Villa y compañía, coincidieron sobre el verde.
Cabe destacar que el único que se quedó sin disputar un solo segundo los partidos de este parón selecciones fue otro azulgrana como Ansu Fati. Llegó a la concentración después de regresar a los terrenos de juego por lesión y Luis Enrique quiso recompensarlo con su llamada pero vio mejor no forzarlo en esta ocasión. No hay que olvidarse, tampoco, de Pedri, que será un fijo si mantiene el nivel ofrecido en el último año.