Los cargos contra la Federación de Fútbol de Inglaterra responden al enfrentamiento entre seguidores de los dos equipos detrás de una de las dos porterías momentos antes del pitido inicial del choque, ganado por 0-3 por el cuadro inglés.
La UEFA acusa, por su parte, a la Federación Lituana por infracciones de las normas de venta de entradas y por tener las escaleras bloqueadas.
Los casos serán estudiados por el Comité de Control, Ética y Disciplina de la UEFA el próximo 22 de octubre.