El cronómetro pasa a toda pastilla en el vestuario del Madrid y Lopetegui ya no puede aguantar más a los titularísimos. Su puesto está en el aire y cuando el agua sube al cuello, las medidas ya son radicales. Benzema lo va a tener difícil.
Mariano y Vinicius ya se asoman al equipo titular. En el caso del brasileño, por las dudas físicas que exhibe Gareth Bale. Pero ya es un síntoma, que los dos jóvenes, los dos fichajes del verano, están en el césped.
Nunca pensó Julen Lopetegui que entraran contrarreloj, en modo salvador, de revulsivos y con tanta ansiedad. Pero el fútbol tiene vericuetos inesperados y el técnico del Real Madrid se ha encontrado por diferentes lesiones y circunstancias en un momento crítico, que va a resolver, si le dejan, apelando a cambios profundos en el equipo.
No pudo levantar el vuelo el Real Madrid en Vitoria, donde sí puso ardor guerrero y fuste Odriozola, el ex jugador de la Real Sociedad, que siempre intentó percutir con corazón en el costado derecho. A balón parado, en el último suspiro, el Alavés puso contra las cuerdas al Madrid.