La Federación de Macedonia del Norte habría elevado una protesta a la UEFA por lo ocurrido tras el tercer gol austriaco. La celebración de Arnautovic podría costarle cara.
Arnautovic salió, marcó y lo celebró con furia. Se puso a bramar algo que se ha interpretado como insultos hacia los futbolistas de etnia albanesa que jugaban para Macedonia del Norte, situación que se encuadra en el conflicto que sigue latente en los Balcanes.
Aunque él ha tratado de explicar lo ocurrido, negando que fuera un episodio de racismo, desde Macedonia del Norte exigen un castigo ejemplar para el austriaco, de ascendencia serbia.
Así reza el comunicado de la Federación Normacedonia:
"La Federación de Fútbol de Macedonia condena enérgicamente el estallido nacionalista del representante austríaco Marko Arnautovic, después de un gol marcado en el partido de ayer con Macedonia dirigido al representante macedonio Ezdjan Alioski.
Al mismo tiempo, les informamos que hemos enviado una carta oficial a la UEFA exigiendo el castigo más severo para el representante austriaco Marko Arnautovic. Como 'Casa del Fútbol' siempre estamos en contra del nacionalismo, la discriminación y todas las demás formas de insultos y arrebatos que no están en el espíritu del fútbol y los valores que todos mantenemos juntos.
Siempre nos pondremos de pie y defenderemos los intereses y la dignidad de los jugadores nacionales macedonios donde sea que actúen".
No es la única polémica de esta Eurocopa en la que, por un motivo u otro, aparece Macedonia del Norte. Grecia reclamó a la UEFA que el combinado balcánico cambiase su denominación, para ajustarse a la oficial, una rencilla entre ambas que viene de lejos.