Muchos aplausos, poco fútbol

El Parque de los Príncipes recibió a su rey con todos los honores. El feudo parisino se fundió en aplausos en la vuelta de Leo Messi a la Ligue 1 con el Paris Saint-Germain tras conquistar el Mundial. Aparte del homenaje que le brindó la grada al rosarino, este hizo lo mismo con Pelé con una camiseta en el calentamiento. Iba de leyendas la cosa.

El conjunto de la capital de Francia empezó 2023 de la peor forma posible con una derrota en casa del Lens. En dicho encuentro, Mbappé estuvo solo liderando la delantera en una actuación gris del de Bondy, que quizás todavía tenía en mente ese encuentro ante su compañero de vestuario en el que salió derrotado en Catar.

Tras eliminar en copa al Chateauroux, la plantilla de Galtier recibió en casa y ante su gente a un Angers colista. Esta vez, fue el francés el que no estuvo sobre el verde, pero sí Neymar y Messi. Lo que se esperaba como un choque plácido y cómodo se transformó con el paso de los minutos en una prueba de fuego para los de casa.

Y eso que la parroquia parisina celebró pronto la primera diana, ya que una jugada que empezó Messi por la derecha terminó con el centro de Mukiele al primer palo, donde apareció Hugo Ekitike para meter la bota y abrir la lata. El delantero suplente está respondiendo bien a las oportunidades que le da su entrenador.

A partir de ahí, el PSG confió en su calidad y en su potencial ofensivo y se relajó. Los minutos pasaron y la posesión fue de un lado a otro, pero sin llegar a zona peligrosa de Bernardoni. Algunos destellos del argentino y las intentonas de un Neymar que bajó hasta el centro del campo para recibir fueron lo mejor de los locales.

Ramos tuvo oportunidad de elevar la distancia en el marcador de un cabezazo a pase de Messi y luego, el '30' rozó su tanto con un zurdazo cruzado que fue repelido por el meta visitante. La bajada de ritmo y los pocos esfuerzos del Angers en robar la pelota acabaron con una primera parte en la que apenas pasó nada.

Nuevo año, mismo Messi

En la segunda mitad, los de Abdelaziz Bouhazama dieron un paso al frente y le robaron la posesión al PSG. La bola circuló de un lado a otro y los parisinos solo persiguieron sombras en los segundos 45 minutos. Ramos tuvo que achicar aguas en repetidas ocasiones ante la pasimonia de la defensa y las ganas de los atacantes.

En el 61', Sima tuvo la más clara después de controlar dentro del área. El delantero recibió un poco escorado a la derecha y soltó un zapatazo ante la presencia de Donnarumma que se fue por encima del larguero. Minutos después, Messi anotó en su regreso, pero el linier levantó el banderín indicando fuera de juego.

Lo que pareció una posición antirreglamentaria de manual se convirtió en dudas debido al tiempo que empleó el colegiado a hablar con los árbitros de VAR, quienes finalmente sí dieron validez al tanto del rosarino. Mukiele se la dejó de cara y el '30' tan solo tuvo que cambiarla de palo con su pierna derecha para hacer el 2-0.

Partido que se le atragantó al PSG con el paso de los minutos y que finalmente quedó cerrado por la calidad de los de arriba. Neymar también pudo celebrar su tanto, pero esta vez, sí que estuvo más adelantado que la defensa. Finalmente, los primeros tres puntos de 2023 para un PSG que deberá cambiar si no quiere repetir la debacle en Champions.