El partido iba 1-1. El conjunto de Los Yébenes sacó un córner en el añadido y Rueda marcó. Un gol que el Alcobendas protestó porque, a juicio del equipo visitante, no había entrado. El supuesto gol fantasma subió al marcador.
El árbitro Christian Nemes lo dio por válido y, con el brazo extendido, un jugador le chocó la mano. Un gesto que no gustó nada al conjunto visitante, muy enfadado con el arbitraje.
Muy enfadado porque, además de quejarse de este gol en el añadido, lamenta que sufrió una expulsión en el minuto 20 y la anulación de un tanto en el 38.
"En pos de la verdad y para evitar suspicacias ofrecemos una toma cercana de lo ocurrido con el árbitro. Saquen sus propias conclusiones a 5 metros y no a 95. Aquí el único que choca (mal) es nuestro jugador mientras se señaliza gol y éste aparta la mano", publicó Los Yébenes en redes sociales para evitar dudas para zanjar cualquier tipo de polémica.