Ascendió al Málaga a Primera, firmó a leyendas y, ahora, entrena en China

Echar un vistazo a los entrenadores que, en la actualidad, dirigen a equipos de ligas lejanas como la China o la Catarí puede resultar divertido. Esta jornada, por ejemplo, el Wuhan Three Towns perdía por 3ª ocasión seguida. Lo hacía por goleada, por 4-1, frente al Shanghai Shenhua, con lo que se ha complicado sus opciones de permanencia, aunque todavía queda prácticamente toda la temporada por delante.

De entrada, esta historia puede resultar nimia para el lector. Debe ahondar más. ¿Quién es el técnico de este equipo? El español Ricardo Rodríguez. La primera sensación es de confirmación de que los estrategas del país ibérico están muy cotizados en competiciones exóticas o que, al menos, se consideran exóticas desde el punto de vista europeo porque son lejanas. Escarbando más, el aficionado reparará en que este especialista en pizarras y despachos tuvo mucho que ver con el último ascenso a Primera División de uno de los históricos nacionales que sufren en Primera Federación actualmente, el Málaga.

La carrera de Rodríguez comenzó en las categorías inferiores del Real Oviedo, el club de su tierra, antes de pasar un tiempo como director de la cantera del Real Madrid en México. De ahí, regresó a los banquillos con el Juvenil del Girona, desde el que pasó al sénior y acabó despedido. Entonces, aceptó un puesto en el B de La Rosaleda en el que su estancia fue muy corta porque Juan Ramón López Muñiz confió en él para que le ayudara en las labores del plantel principal.

Juntos, llevaron a los 'boquerones' a la élite en la temporada 2007-08. Se trata de la postrera ocasión en que los blanquiazules volvieron a las máximas cotas del fútbol nacional. Era el punto de partida de una década gloriosa en la que se dieron hitos como el debut en la Champions League, pero que siguieron con el regreso a Segunda y, más recientemente, la caída a la tercera escisión del deporte rey patrio.

Antes del Málaga de Sergio Pellicer y de los Dioni, Kevin, Larrubia y demás, mucho antes, el exsegundo entrenador de Martiricos ocupó una de las oficinas del club entre 2008 y 2010 como director deportivo. A estos despachos se los ha conocido, durante la etapa de Manolo Gaspar al mando, como La Cueva. Es curioso porque es justamente Rodríguez quien cerró el fichaje de Manolo Gaspar cuando era un lateral derecho que llegaba procedente del Levante para su segundo periplo en la Costa del Sol.

Gaspar no es el único nombre reconcible para la afición andaluza que aterrizó o se asentó en la historia del club bajo el ala de Ricardo Rodríguez. También es el responsable de la renovación de Weligton tras un año con un rendimiento de lujo tras su paso por el Grashoppers. Gustó especialmente una aguerrida actuación contra el Barcelona en el Camp Nou y las corbatas, conscientes de ello, no tardaron en operar para garantizar su continuidad. Ahora, es una leyenda.

A Duda también se le concibe como tal y el amarre de su segunda estancia en La Rosaleda, la definitiva, se llevó a cabo asimismo con el actual entrenador del Wuhan Three Towns en la ciudad 'boquerona'. Aceptó pagar 700.000 euros al Sevilla para quedárselo y el resto es historia. ¿Qué fiel blanquiazul no recuerda con cariño aquel derbi ganado por 3-2 con una asistencia de exterior de Pablo Pérez desde la frontal y un golpeo potente, arriba, del capitán, que celebró la victoria quitándose la camiseta?

La de Albert Luque es otra elástica de fácil aparición en el recuerdo del aficionado de Martiricos y que estuvo colgada en su vestuario en dos periodos distintos. El último, el previo a su retirada, se produjo gracias a un acuerdo cerrado con Ricardo Rodríguez. El entonces futbolista de 30 años declaró que quería volver a ser feliz con el balón en los pies tras un corto paso por el Ajax y el director deportivo le concedió este deseo. Acabó siguiendo sus pasos y, actualmente, preso de la polémica tras ser apartado de la Federación Española de Fútbol.

Mientras Luque apuraba sus últimos años pisando césped y se hacía un nombre en el estamento nacional, Rodríguez extendía su saber hacer al ámbito internacional. Añadió la Selección de Arabia Saudí y algunos conjuntos tailandeses y japoneses a su currículum antes de recibir la llamada de China, donde trabaja desde enero de este mismo año con el objetivo de mantener firme a un proyecto que necesita su ayuda en una liga en decadencia.

 

January 8, 2024