"¿Que qué me ha dicho De Rossi? Me dijo: 'Estoy feliz de despedirme de la Roma contigo como entrenador". Esas fueron las palabras de Claudio Ranieri cuando, siendo entrenador de la Roma, había asistido al adiós de una leyenda del club, Daniele de Rossi, que dejaba el Olímpico para disfrutar de un tiempo en Boca Juniors antes de retirarse. Casi cinco años más tarde, se ven las caras en la jornada 23 de la Serie A.
El otrora aprendiz se ha convertido en el jefe de una nave que vira hacia Europa. Su profesor, en cambio, maneja el inestable timón de un Cagliari que cuenta con su amor eterno, pero no con la tranquilidad suficiente como para apuntar con más firmeza a la permanencia. El descenso a la B es una amenaza real y la directiva confía en que su experiencia y calma sirvan para que el vestuario no se deje llevar por la marea del fondo de la tabla.
El reencuentro será emocionante y ayudará a mostrar una imagen algo más suave ante los medios que la proyectada por el anterior técnico de los 'giallorossi', José Mourinho, que fue despedido de manera inesperada no por la naturaleza de sus resultados, que era mala, sino por cómo el asunto no se terminó de filtrar del todo en la prensa antes de que los jefes del equipo del Lacio tomaran la decisión. Aunque, en esta etapa, se vio a un 'The Special One' más cercano, las salidas de tono en sala de prensa no dejaron de aparecer de vez en cuando.
Ahora, la Roma quiere ser la cuna de la trayectoria de un De Rossi entrenador cuyo perfil todavía es un poco desconocido. Solo cuenta con una historia anterior, la que le tuvo en el banquillo del SPAL durante menos de 20 partidos antes de que sus mandamases se hartaran de su alto ratio de derrotas. Se comprende que, actualmente, en un ambiente que conoce de sobra y en el que se le respeta sumamente, podría causar un impacto positivo en el vestuario.
En el partido de esta noche, de hecho, recordará con más nostalgia que nunca su etapa pisando con tacón de bota, no con suela de mocasín, el césped del Olímpico, que agasajará a Ranieri en su visita a uno de sus muchos hogares en el 'Calcio'. Juntos, disputaron cerca de 600 partidos. Su etapa de mayor estabilidad juntos se dio entre 2013 y 2016, cuando el profesor anotó el nombre de uno de sus alumnos más queridos en sus pizarras en 70 ocasiones.
Quién sabe si no le susurrará, como le hizo a él en aquel mayo de 2019, algún secreto para mantenerse un tiempo más en el banquillo de la Roma. Cuenta con la materia prima necesaria, una dupla Lukaku-Dybala de relumbrón y una horneada de jóvenes que Mou, aunque no se le haya reconocido mucho esta labor en Italia, ha ido cocinando a fuego lento. Quizá le miren con tal admiración que su mera presencia les haga desarrollarse más rápido de lo habitual y, así, prolonguen ese gusto de ver "Daniele de Rossi" en el hueco de "entrenador de la Roma" en las previas.
February 4, 2024