"Lo dicho, dicho está. Lo dije en su momento porque fue lo que me pareció", reiteró Suárez, lejos de arrepentirse de sus palabras.
El azulgrana insistió en la rareza de ser amonestado en dos ocasiones en un espacio corto de tiempo: "Es raro, una de las pocas veces que se sacan dos tarjetas amarillas en tan poco tiempo".
Sin embargo, prefiere no darle más vueltas al asunto. "Ya son cosas de pasado y lo que pase en la final de Copa ya se verá", concluyó.