La ciudad oscense se paralizará este domingo a partir de las 16:15 para recibir al 13 veces campeón de Europa en un partido que, pase lo que pase, será histórico.
Y es que el Real Madrid jugará por primera vez en Huesca en un partido oficial ante uno de los clubes más modestos de la Primera División.
De hecho, su único encuentro en la mencionada ciudad se produjo hace más de 55 años, en un amistoso que medía al por entonces campeón de LaLiga ante un conjunto oscense que militaba en Tercera División.
Ahora, más de medio siglo después, la ciudad volverá a recibir al gigante de la capital, cuya historia y presupuesto intimidan al modesto equipo aragonés.
Las cifras hablan solas. El conjunto azulgrana presentó para este año un presupuesto récord de 55 millones de euros, según indica 'AS', tras lograr el curso pasado un glorioso ascenso.
Unos números irrisorios en comparación a los que maneja el Real Madrid, que quedan reflejados en un simple jugador: Vinicius Junior.
La perla brasileña ha aterrizado este verano en la disciplina blanca y, en su momento, le costó al equipo del Santiago Bernabéu 45 millones de euros, solo diez 'kilos' menos que el presupuesto oscenso.
Las diferencias, por tanto, son más que evidentes, y todo ello sin entrar a valorar la población del equipo, que apenas supera los 50.000 habitantes, un número muy alejado de las millonarias cifras de la capital de España.
Por último, el Madrid también encontrará un fuerte impacto en las gradas. Y es que pasará de jugar en el Bernabéu ante 80.000 espectadores a hacerlo ante los pocos más de 7.000 que se pueden dar cita en El Alcoraz.
Números y evidencias que reflejan una Liga a dos velocidades pero que este domingo, durante 90 minutos, pelearan frente a frente sin que nada ni nadie pueda dar por seguro ningún resultado.