Sólo lleva un año en la élite, pero Vinícius ya mueve masas. No al nivel de su ídolo Neymar, pero va en camino. El futuro madridista, en el último choque ante Bahía, volvió a dejar una muestra de ello.
Una vez terminado el encuentro, el delantero se acercó a una zona en la que se situaban decenas de seguidores de Flamengo, que alucinaron al tener a su ídolo tan cerca.
Vinícius, atento con todos, correspondió posando para distintas fotografías y firmando autógrafos, pero la locura desatada obligó al brasileño a salir de allí con premura.
Los apasionados seguidores querían un recuerdo con su estrella efímera, puesto que más pronto que tarde dará el salto a Europa. Así, el chico que ya no se encontrará con Zidane estuvo a punto incluso de quedarse sin su camiseta.