La victoria en el Mundial de Clubes trajo la última alegría de un año inolvidable para el Madrid. El de la 'Decimotercera', aunque también el de las fugas de Zidane y Cristiano. En una recta final más que dubitativa, el cuadro blanco volvió a ocupar la cima del mundo y lo hizo con varios futbolistas tomando un protagonismo inesperado.
En concreto, hay seis jugadores que a buen seguro le pedirían una prórroga al 2018. El caso más evidente es el de Marcos Llorente. Con Zidane fue un futbolista residual, también para Lopetegui. Su salida parecía un hecho, pero llegó Solari y Casemiro se lesionó. El centrocampista tomó la titularidad y su nivel ha crecido por momentos, incluso anotó ante el Al Ain en una final que le condecoró como 'MVP'.
Después está Vinicius, otro de los que mojó -a medias- en Abu Dabi. Su 2018 quedará grabado a fuego en su mente. No es para menos, se despidió como un héroe de su querido Flamengo y aterrizó en el Real Madrid. Aún es un proyecto, pero el joven atacante ha ido sumando minutos en pos de su crecimiento. Su sonrisa y desparpajo ilusionan al madridismo.
Dani Ceballos fue otro de los olvidados por Zidane. No así por Lopetegui, que desde un primer momento confió en el talento del centrocampista. Ya suma más minutos en lo que va de curso que en toda la campaña anterior, un síntoma inequívoco de que las cosas le van mejor. En la Selección, además, disfruta de protagonismo desde que Luis Enrique tomó el mando.
También encontramos a Benzema, que está a un gol de sus registros de la pasada temporada. Con sus idas y venidas, el francés ha mejorado sus prestaciones notablemente. En las últimas semanas de 2018, el francés fue de lo mejor del Madrid. A su derecha estuvo Lucas Vázquez, revitalizado e incombustible. Con Solari, Lucas es indiscutible y ha dejado en el banquillo a Isco o Asensio.
Por último, el gran exponente de la cantera en esta 2018-19: Sergio Reguilón. Sin hacer ruido y después de una pretemporada al gran nivel, el lateral izquierdo ha demostrado ser un relevo de garantías para Marcelo. Incansable en su banda, tiene mecha y futuro por delante para asentarse en un plantilla tan cara como la del Madrid.