Este martes, el FC Barcelona cerró un ciclo con la dimisión de Josep Maria Bartomeu. Encerrado entre los socios por la moción de censura y forzado por la Generalitat a convocar la votación, el presidente azulgrana anunció su salida en un acto donde dejó una última píldora.
Quizá empequeñecida por el objetivo principal de la rueda de prensa, la última noticia que dio Bartomeu no tuvo el impacto que habría tenido por sí misma. Hablamos de la inscripción del Barça en la conocida de momento como Superliga Europea.
Hablamos de un torneo que comenzaría en septiembre de 2022 y en la que se espera que participen los grandes clubes de las cinco principales Ligas; estas son LaLiga Santander, Premier League, Bundesliga, Serie A y Ligue 1. Y del que los 'culés' ya han hablado abiertamente.
El Barça es el primer gran club que reconoce públicamente que se ha inscrito en este formato, pero Bartomeu dijo también que otras entidades importantes del continente han seguido su mismo camino.
"La decisión de jugar la competición europea deberá ser ratificada en la próxima asamblea. La Superliga Europea de clubes garantizará que el club siga siendo de los socios. El club tiene una solidez indiscutible", señaló el presidente azulgrana para justificar el movimiento.
Según medios como 'Sky Sports'y 'Sports Illustrated', los otros dos equipos de España que estarían dispuestos a entrar en el torneo son el Atlético y el Real Madrid. De hecho, se habló meses atrás de que Florentino Pérez había sido uno de los impulsores del proyecto.
Asimismo, en la Superliga Europea, cuyo nombre se rumorea que podía ser European Premier, entrarían también equipos de los citados países como Liverpool, Manchester United (estos dos de propiedad norteamericana), Paris Saint-Germain, Bayern de Múnich, Inter y Milan.
El formato de este campeonato sería al estilo NBA o Euroliga de baloncesto. Habría partidos a ida y vuelta entre los 18 clubes participantes, quienes acabarían en un 'play off' final con sede única para decidir un campeón. Al estilo de lo que se vio en Lisboa, aunque aquello estuvo forzado por la crisis del coronavirus.
Financieramente, el proyecto se sujetaría por un crédito de 5 mil millones de euros que el banco estadounidense JP Morgan ha ofrecido a los organizadores para que el proyecto eche a andar. Un impulso que explica las justificaciones de Bartomeu en su rueda de prensa.
La polémica detrás de este asunto está en qué ocurriría con la Champions League y los campeonatos domésticos. Desde LaLiga, Javier Tebas ha vuelto a mostrar su rechazo y calificó a esta Superliga de "competición fantasma", a la vez que dijo que "sería la ruina para el Barcelona".
Alexander Ceferin, presidente de la UEFA, dijo en varias ocasiones que no permitiría la existencia de un proyecto como este y Andrea Agnelli, presidente de la Juventus y de la Asociación de Clubes Europeos, también llegó a aseverar que esto nunca llegaría a ocurrir.
Sin embargo, con el dinero puesto encima de la mesa todo podría ser muy distinto. Al menos, por parte de los clubes. De momento, el FC Barcelona ha dado un paso adelante en la última decisión de Bartomeu. Habrá que ver si sus sucesores dan continuidad a la idea.