Las aguas están algo revueltas en el Real Madrid. Zidane explotó en su vuelta en rueda de prensa y no dudó en dejar claro que no merecía el "maltrato" que estaba recibiendo por parte de la prensa.
Acostumbrados a las sonrisas y los discursos sencillos, esa imagen de 'Zizou' chocó no solo a la afición, sino al equipo. El francés defendió su trabajo y prometió guerra pese a la difícil situación en Liga en un tono visiblemente enfadado.
"Si la gente quiere que lo deje, eso no va a pasar", comentó también ante la prensa el técnico francés. Y aunque no sabemos cuáles fueron sus palabras en el vestuario, su discurso también hizo efecto en el equipo.
Un discurso que se notó en la remontada frente a la SD Huesca, donde Varane se vistió de héroe y evitó otro disgusto a Zidane con un doblete salvador, para poder regresar a casa con los tres puntos bajo el brazo.
Parece que a los jugadores le caló la reacción del técnico galo ante la prensa, que no dudó en volver a defender a sus hombres ante los periodistas. Y la plantilla le devolvió la entrega y dedicación sobre el terreno de juego hasta firmar la primera remontada tras encajar el 1-0.