El increíble descenso a los infiernos de Alex Song se confirma: jugará en Yibuti

Está claro que la vida de Alex Song da para película. Tiene 27 hermanos, jugó en dos equipos de los más grandes de toda Europa y luego ha vivido todo tipo de sucesos rocambolescos hasta su alucinante fichaje por un equipo de Yibuti.

Fichado por el Barcelona en 2012 para que se convirtiera en el sustituto de Yaya Touré, ya sin Pep Guardiola y con Tito Vilanova al mando del Barcelona, el camerunés no respondió a las expectativas, a pesar de lo cual firmó un récord de imbatibilidad en el Camp Nou que no fue superado hasta la llegada de Paulinho.

Apenas tuvo hueco en el Barça y el aterrizaje de Luis Enrique, tras el año para olvidar del Tata Martino, restó aún más su protagonismo en el equipo y tuvo que hacer las maletas para volver a Inglaterra.

Luego, en Rusia, vivió una depresión y en el Sion suizo, su último equipo, tampoco acabó nada bien: le obligaron a irse junto a otras estrellas como Doumbia o Djourou por no bajarse el sueldo.

A sus 33 años, todavía en edad de estar viviendo sus últimos momentos en el Viejo Continente, a Song le ha llegado la oportunidad de redescubrir su pasión por el fútbol en Yibuti.

El dinero ya no es lo más importante para un jugador que reconoció que solo quería ser millonario cuando llegó al Barça. Cumplió ese sueño, pero no el de triunfar del todo en el mundo del fútbol por su extraño carácter, aunque condiciones tenía.

Su llegada al AS Arta Solar7, donde le recibieron -modestamente, eso sí- como una auténtica estrella mundial, ya no le permitirá disfrutar de los lujosos campos de Europa. Yibuti será como una especie de vuelta a casa, a sus inicios. Quizás encuentre, por fin, la felicidad en un terreno de juego que lleva buscando casi una década.

 

November 12, 2020