Pudo festejar Cembranos en su estreno, no así en el Santiago Bernabéu, que vivió una noche plácida gracias a un buen Benzema, la frescura de Rodrygo y, en general, la notable actuación del equipo blanco. El mismo conjunto que se vino con los puntos de Estambul superó con placidez al Leganés.
Sí tiene problemas la escuadra pepinera, que se descompuso a la primera en el Bernabéu. Pocos pecados más mortales que amotinarse en el área y dejar hacer al Madrid en Chamartín. En un minuto lo resolvieron los de Zidane: gol de Rodrygo, gol de Kroos, sendas asistencias de Benzema del minuto 7 al 8. Finito.
Quien se entretuviera mirando el móvil se pudo perder los goles de un Madrid que, en cambio, sí estuvo centrado desde el minuto uno. Sin demasiados alardes, pero con convicción, el bloque 'merengue' quiso y pudo. Un buen chute de ánimo tras lo de Son Moix y continuidad a lo visto en Estambul.
Zidane apostó por el mismo equipo que venció al Galatasaray y sus hombres no le defraudaron. Es posible que para empresas más grandes necesite la potencia de Gareth Bale o el genio de James. Ante el Leganés, el Madrid mostró su versión más competitiva y no perdió comba con el Barcelona, líder hasta que juegue el Granada y, sobre todo, se dispute el 'Clásico'.
El Leganés salió con defensa de cinco hombres y ni por esas pudo contener al Madrid. Avisaron los blancos con centro al segundo palo de Valverde, pero fue Rodrygo quien metió la primera. No desaprovechó el caramelo de Benzema. El generoso Karim repitió empresa un minuto después, esta vez fue Kroos el beneficiario.
No había llegado el partido ni al minuto diez cuando el Madrid ya ganaba 2-0. No tuvieron su noche Silva, Bustinza u Omeruo. Braithwaite corría, pero no le llegaban balones. La tocaba el Madrid.
Hazard de animó y provocó un penalti. Lo tiró Ramos, se adelantó Soriano y lo detuvo, pero el VAR detectó el ilegal movimiento del guardameta. Soto Grado decretó repetirlo: a la segunda no falló el camero.
El Madrid montó un campamento base en el balcón del área rival y si el partido se fue 3-0 al descanso fue porque ni Hazard, ni Rodrygo estuvieron muy atinados. También hacía lo suyo Soriano.
Tras el descanso, ni que el equipo de Zidane saliera con el freno de mano ayudó al Leganés, quien miraba el reloj a la espera de la conclusión. Pasó que Bustinza la perdió, Marcelo la robó y Modric fue objeto de penalti tras un dos para dos. Benzema se llevó el premio que le faltaba desde los once metros.
La noche fue tan agradable para el Madrid que hasta a Jovic le dio tiempo a marcar su primer gol de blanco. Y otra vez con suspense, porque hizo un tanto en fuera de juego que le anularon. En el añadido, de cabeza, sí logró derribar la muralla. Una muralla que se le pone muy alta al Leganés.